Un año de bendiciones...

Días moviditos los que corren, más que los de cualquier fin de año… Uno cree de pronto que el 31 lo que finaliza es la vida y no ya el año, todos corren algunos ni saben adónde, pero bueno así son los fines de año, y nosotros, lamentablemente, no somos ajenos…

Hacer balances este año sería faltarle el respeto a todos los demás años vividos, seria levantar tan alto la vara que luego resulte dificultoso alcanzarla, la balanza está llena de un lado, hoy tiene unos 6 kg de peso, y se llama Simón, sin contar todo lo demás de maravilloso que el 2014 nos regaló. (#BienvenidoSimón)
Porque aun seguimos trabajando como el mes uno, porque tenemos nuevas y más lindas responsabilidades, porque hemos decidido festejar con nuestros seres queridos las cosas lindas que nos pasan, porque le hemos celebrado #BautismoDeSimón, dando una bienvenida al mundo de la fe cristiana. 

Por todos esos momentos queremos este año levantar la copa, por nuestro pequeño Rey primero claramente, luego por sumar otro año de amor, respeto, compañerismo, unión y tolerancia de nuestro feliz matrimonio. Por la familia, por los hermanos, por los padres y suegros siempre presentes, los nuevos amigos, por los viejos, por los que no te llevas tan bien, como por los que te llevas maravilloso, por los que juntan la caca del perro, por los que usan más bicicleta, por el mundial y el 7 a 1, por los que tienen trabajo y también por los que esperan esa oportunidad. Por menos regalos y mas abrazos, por mas lagrimas de alegría y  menos de desconsuelo. 

Por el AMOR, por encarar con amor todo lo que se emprenda, por los buenos momentos pero más por momentos que estos pudieron ser compartidos, porque se ríe distinto cuando la risa tienta a otro. Por el Padre Ignacio, como por todos aquellos que esperan por ser padres aprendan ( y aprehendan) lo que les falta para poder hacerlo.

Por los que siempre están a nuestro lado, por los que se alegran de las buenas noticias, pero también por aquellos que momentáneamente se encuentran obnubilados con malos sentimientos, nuestros respetos karmicos para ellos, atado a nuestros deseos personales de que encuentren (encontremos) la huella en el camino o la luz que nos guie hacia un estado de mayor felicidad. 

Brindamos por eso, por nosotros, por ustedes y porque todas las personas del mundo, principalmente los más chiquitos tengan la seguridad alimentaria para crecer sanos y fuertes, sin limitaciones de ningún tipo, para que puedan ser felices en familia desbordados del cariño y afecto que estos les brinden.
Que tengan una hermosa navidad y un prospero Año Nuevo.
Fran, Vane y Simón